La Poliurea permite aplicaciones muy ventajosas que abarcan diferentes sectores como la industria alimentaria, petroquímica, eléctrica, naval… Su alta resistencia posibilita su uso como anticorrosivo en elementos enterrados, sumergidos o expuestos a la intemperie. Además, son sistemas con un excelente comportamiento bacteriológico, aislantes de la humedad e impermeables, lo que impide que se produzcan filtraciones al suelo de productos nocivos.
Superando en eficacia a los sistemas de impermeabilización al tratarse de membranas continuas adheridas y elásticas. Los sistemas de Poliurea se aplican igualmente en pavimentos deportivos, industriales o decorativos y tienen una elevada resistencia a la intemperie, y al desgaste. Aportan además otras ventajas al sector de la construcción: su rapidez de aplicación y puesta en uso y puesta en uso, la posibilidad de utilizarlos en las condiciones más extremas de la temperatura y humedad ambiental y su adaptabilidad a los elementos constructivos más irregulares.
Las poliureas con las que trabajamos fueron pioneras en el sector automotriz, y son líderes en el mercado americano de post-venta y sus sistemas se aplican en las plantas Ford, Nissan y Mazda.
Se ha demostrado a lo largo de dos décadas, que las poliureas son la solución definitiva para proteger las carrocerías contra la oxidación y el desgaste.
Esto es así porque son elásticos, no cuartean por cambios de temperatura y resisten el derrame de combustibles u orines.
Adheridos al sustrato, no reducen el espacio de carga, evitan vibraciones o abolladuras y protegen a la carga de daños por deslizamiento
